Juez iraní amenaza a prisionera política con violarla

Sori Babaei, una prisionera política a quien se le concedió la libertad temporal la semana pasada para buscar a su hija desaparecida, ha sido amenazada con violación por un juez mientras estaba bajo custodia, según confirmó IranWire.

Aida Moradbehrouzi, hija de 14 años de Babaei y Mohammed Reza Moradbehrouzi, ex preso político, está desaparecida desde hace más de dos semanas, junto con su compañero de clase Hasti Mohammad Hossei, de 13 años.

A Babaei, que había estado encarcelada desde el año pasado por su participación en una campaña contra la obligatoriedad del hijab, se le concedió una licencia de 10 días bajo fianza.

Durante su encarcelamiento, Babaei fue sometida a fuertes palizas en múltiples ocasiones.

Fue arrestada después de que las autoridades ingresaron por la fuerza a su casa sin orden judicial, derribaron la puerta de entrada y agredieron brutalmente a la activista, quien sufrió graves heridas en las manos.

Un oficial de policía llamado Yazdan Porgohar, ordenó a los agentes que arrestaran a esta opositora del hijab obligatorio, diciendo: "Quiero aplastar a Sori. Bájenla y esposenla".

Al encontrar resistencia por parte de Babaei en presencia de agentes femeninas, Porgohar recurrió a la violencia física y esposó por la fuerza a la detenida.

La obligaron bajo coacción a usar el hiyab y a aceptar no expresar ninguna objeción.

"En contra de sus deseos internos, accedió, motivada únicamente por la necesidad de localizar a su hija Aida", dice un familiar.

A Babaei se le informó que si se abstenía de protestar y evitaba hablar con los medios de comunicación durante su liberación de prisión, el caso contra ella podría ser desestimado o podría recibir una amnistía.

El permiso para comunicarse con su familia le fue concedido al cabo de 10 meses, con la condición de que "ningún sonido suyo fuera difundido en los medios de comunicación" y "ella se abstuviera de hacer declaraciones significativas".

Las lesiones infligidas a este presa política durante su detención fueron verificadas por el médico de la prisión y peritos forenses.

A pesar de que Babaei presentó una denuncia sobre la agresión, se le informó que no se procesaría debido a su negativa a usar un pañuelo en la cabeza.

Durante el proceso judicial, el juez Ghodrat Bigdeli se describió a sí mismo como el "ángel de la muerte" de Babaei.

La persona cercana a la familia relata: "Esta presa política detalló la agresión que sufrió camino a prisión antes de que el juez Bigdeli elogiara las acciones de los agentes".

Según esta fuente fiable, el juez Bigdeli amenazó a Babaei con violarla en presencia de otros funcionarios judiciales si ella se negaba a cumplir sus órdenes relativas a su vestimenta en el tribunal.