Bolivia expresa su apoyo al gobierno iraní y ataca a los manifestantes

La embajadora de ese país latinoamericano en Irán, Romina Pérez, tildó a las valientes y masivas protestas que encabezan miles de iraníes como “orquestadas por sionistas británicos y estadounidenses”.

Mientras las principales ciudades de todo el mundo continúan siendo testigos de grandes manifestaciones en apoyo del pueblo iraní, que sostiene inquebrantable su cuarta semana de protestas, Bolivia se alinea detrás del régimen represor iraní, al que defiende y tilda de “hermano”.

En un encuentro en Teherán con el alcalde de Tabriz, la embajadora boliviana en Irán Romina Pérez, aseguró que el gobierno de ese país latinoamericano “condena los disturbios en Irán perpetrados por los sionistas británicos y estadounidenses y estamos seguros que estos problemas se resolverán con la comprensión del querido líder de Irán”. Pérez nada dijo de la lucha de las mujeres iraníes que hace cuatro semanas protestan de manera masiva por la muerte de Mahsa Amini, que desencadenó una ola de condenas en el mundo y una sangrienta represión.

Amini, una joven mujer iraní de 22 años, fue detenida el 13 de septiembre por la “policía de la moralidad” en Teherán por supuestamente no respetar el estricto código de vestimenta para las mujeres en Irán, que les obliga a llevar el velo. Murió tres días después en el hospital y su muerte desencadenó protestas en el país y movimientos solidarios en todo el mundo. Estas manifestaciones a las que Pérez llama “disturbios”, fueron reprimidas con sangre, mientras el número de muertos aumenta día a día, al igual que los cientos de heridos y detenidos.

En la reunión con Yaqub Hoshiar, Pérez recalcó que Bolivia e Irán son “países hermanos”. “Tenemos ideas antiimperialistas y nos hemos mantenido unidos contra el imperialismo”, afirmó. Hoshiar, por su parte, celebró el respaldo boliviano.  “La visión antiimperialista de Bolivia es gratificante y es exactamente el mismo mensaje que el Imam Jomeini presentó hace cincuenta años”.

El encuentro de Pérez con el alcalde de Tabriz ocurrió luego de que los presidentes de Irán y Bolivia, Seyed Ebrahim Raisi y Luis Arce en una reunieran el 20 de septiembre pasado durante la 77ª sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, Estados Unidos.

En esa oportunidad, Raisi festejó la sintonía con Arce: “Las relaciones entre Irán y Bolivia son amistosas y en expansión” y añadió que “los lazos entre los dos países no son relaciones políticas ordinarias y deben desarrollarse día a día.”

En Bolivia, partidos opositores y la comunidad en general repudiaron los dichos de Pérez, quien desestimó la lucha de miles de mujeres en defensa de sus derechos. La senadora opositora Cecilia Requena declaró ante medios bolivianos que “son declaraciones absolutamente inaceptables porque terminó relativizando y generando un apoyo al régimen iraní, que en este momento está masacrando a mujeres que luchan por sus derechos”.

Bolivia e Irán: una relación polémica y afianzada con los años

Las relaciones del partido de gobierno boliviano, el Movimiento al Socialismo, con el régimen iraní son muy estrechas desde el primer gobierno de Evo Morales en 2006. la amistad incluyó una visita del ex presidente Mahmud Ahmadinejad en 2012 a territorio boliviano, y la apertura de un canal de televisión iraní, PressTV, que desde entonces difunde propaganda musulmana.

Desde entonces, el MAS ha puesto en funcionamiento una “Escuela Anti - imperialista” para las Fuerzas Armadas, donde los instructores son agentes llegados desde Irán, pero también de Cuba, Venezuela y ahora Rusia. La escuela tuvo su fundación en junio del 2011 y en aquel entonces provocó un incidente diplomático con Argentina, ya que en esa inauguración estuvo presente el entonces ministro de Defensa iraní Ahmad Vahidi, acusado por la justicia argentina de ser uno de los autores ideológicos del atentado contra la mutual judía AMIA en Buenos Aires en 1994, en el que murieron 85 personas. El instituto está ubicado en una zona rural de la provincia oriental de Santa Cruz donde antes funcionó un centro de entrenamiento de cascos azules bolivianos para misiones de paz de las Naciones Unidas.

Los nexos entre Bolivia y la República Islámica de Irán se interrumpieron durante la presidencia interina de Jeanine Áñez pero Arce reestableció las relaciones apenas asumió su mandato en noviembre del 2020, sumándose así a Venezuela, Cuba, Argentina, Perú, México, Chile y recientemente Colombia, países latinoamericanos que han demostrado públicamente su alianza con el régimen iraní

Luego de los polémicos dichos de la embajadora boliviana, ni ella ni Arce destinaron algún comentario al grado de brutalidad de la represión iraní que, según la ONG Iran Human Rights, ya dejó más de 185 muertos, entre ellos 19 niños.